El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón Joaquín Olona, ha opinado que esta norma «no es necesaria» para estimar que «el incremento de la dimensión de las cooperativas hay que hacerlo por la vía de los incentivos».
Olona ha indicado que desde el Gobierno de Aragón «no tenemos un mecanismo directo para apoyarlos». También ha añadido que el aumento del tamaño de las cooperativas «hay que hacerlo por la vía de los incentivos, es el mecanismo que tenemos en el Departamento».
El consejero ha detallado que se trata de subvenciones para la inversión en activos fijos, en concreto, para la creación o ampliación de industrias agroalimentarias, así como para la promoción agroalimentaria. También ha apuntado que son «las dos vías para las que tenemos presupuesto» y en ellas se aplican «criterios de concurrencia competitiva».
Ha añadido que a la hora de seleccionar los proyectos, hay que apostar por aquellos que «contribuyen a incrementar la dimensión de las cooperativas, entre otros objetivos». En este punto, ha recalcado que hay que evitar «dar ayudas» a aquellos «que vienen a disgregar o reducir la dimensión de las cooperativas o de los grupos asociativos».
Olona ha incidido en que el sector cooperativo agroalimentario aragonés «no solo representa una buena parte del mundo rural, sino que es un magnífico exponente de la economía social» y «hay algo que no van a hacer nunca, deslocalizarse» por lo que es «un valor en sí mismo que tenemos que proteger, reconocer y defender».
El consejero ha precisado que uno de los objetivos es «priorizar en favor de las cooperativas porque son economía social», y esta última se quiere potenciar desde el Ejecutivo. Para ello se está elaborando una ley, en la que también «tenemos que vincular y visibilizar al sector cooperativo», así como en las líneas de ayuda, algo que «ya estamos haciendo, aunque a lo mejor ellos querrían que fuese más».